Puede ser que tu empresa está dando de baja con las ventas o simplemente quieres que éstas aumenten, te estás haciendo preguntas e intentas buscar una respuesta a una tarea donde no siempre es fácil darle una solución.
1 – Antes de todo analiza tu estatus.
Lo que siempre aconsejo es hacer un buen análisis de nuestra empresa, para individualizar cuáles pueden ser los puntos débiles y cómo podemos resolverlos.
El análisis es siempre importante y debe ser hecho en la base de los números que tenemos, un trabajo que a veces puede resultar odioso pero que tiene toda su utilidad para poder encontrar las fallas del sistema y pensar en cuáles pueden ser las soluciones para resolver los problemas.
2 – Presta atención al cliente.
La atención al cliente muy frecuentemente tiene grietas, el personal encargado del servicio tiende a evitar los problemas, no busca una solución, simplemente tiende a darle una respuesta-excusa muy educada que no le resuelve la situación.
Muchas empresas toman muy poco en consideración el hecho de satisfacer totalmente al cliente y no le ponen atención al hecho de resolver un problema cuando este viene señalado.
El personal encargado raramente sabe cómo actuar para resolver el problema y se limita a sus acciones formales de rutina que le enseñaron.
Otro punto muy importante es que hoy el cliente es tomado mucho más en consideración y tiene palabra sobre nuestro servicio, debemos por lo tanto, dar la máxima atención a sus problemas, de manera que podamos resolverlos y mantener nuestra reputación lo más íntegra posible.
La tecnología actual nos permite una infinidad de sistemas de comunicación como teléfono, correos, chat, redes sociales, etc., y que no siempre vienen utilizadas creando una falla considerable en el acto de comunicarse con el cliente y resolver su problema.
4 – Reúne a tus clientes y comunica.
Ya es una necesidad mantener el contacto continuo siguiendo la comunicación, es muy importante que podamos tener agrupados nuestros clientes y distinguidos según los criterios más oportunos para nuestra actividad, para que en cualquier momento podamos aprovechar la comunicación con él.
El hecho de que le damos importancia y que le demostramos que sabemos escucharlo nos hace ganar su completo agradecimiento consolidando nuestra relación.
Darle información, soporte y cuanto más para mantener nuestra comunicación es de vital importancia para nosotros, en cuanto esto nos permitirá también avanzar nuestras ofertas alimentando la relación comercial y optimizando las ventas.
3 – Descubre tu punto fuerte.
Hay que descubrir cuál puede ser nuestro punto fuerte, el que nos haga distinguir de la competencia y nos permita prevalecer a los ojos de los clientes, desarrollarnos en esta óptica es la estrategia que nos hará ganar.
Si hemos hecho un atento análisis de nuestra empresa y de nuestros clientes podemos enfocar dónde nuestro producto pueda diferenciarse y pueda beneficiarse a favor de determinados clientes.
5 – Organiza tus ofertas.
Si hemos agrupado nuestros clientes y desarrollado una buena comunicación con ellos mismos, nos será muy fácil hacer promoción y programar ofertas para ellos.
El hecho de que tengamos una figura bien clara de quienes son y que hacen, nos permitirá organizar en manera muy atenta nuestras ofertas, con el fin de optimizar la manera más provechosa y los precios.
Esto nos permitirá, también, evaluar que más podemos flanquear a nuestro producto, proyectando así, más volúmenes de ventas, aumentando también la satisfacción del cliente, por un servicio más completo y atento a sus exigencias.
Evalúa bien estos cinco puntos y empieza a crear estrategias adecuadas, no importa si al inicio haya algunos errores, verás que con el tiempo las cosas mejorarán, y tus ventas irán en aumento.
Síguenos, gana dinero, logra tu éxito.
Paolo.
Debes ser identificado introducir un comentario.